volumen alto

25 ene 2012


CÓMO ORDENAR EL SILENCIO EN FRAGMENTOS QUE TENGAN SENTIDO


Estamos bailando y, aunque sólo hay una radio, todos escuchamos un tema diferente. Y por eso que nuestros pasos son tontos, y por eso que nos chocamos, nos pisamos, nos clavamos un codo… Lo intentamos de nuevo, empecinados, bailando con más énfasis, tratando, en un lenguaje secreto, de hacerle entender a nuestra ocasional pareja de baile cuál es el ritmo correcto. O nos dejamos arrastrar, moviendo los pies en espejo, sin sentirlo, fraccionando al otro en una ecuación, ignorando los acordes propios.
Cuesta al principio, pero dicen que es fácil dejarse llevar: hay que memorizar y, luego, saber predecir.
Estamos bailando, recibiendo al Sol y a la Luna, en danzas opuestas pero que se complementan… Y mientras la sucesión de notas me pone triste con ganas de reír, veo que vos te reís con ganas de llorar… Y es increíble lo bien que nos vemos bajo este cielo. Es increíble el brillo, la gracia, la intensidad. Es increíble el pentagrama de tus ojos… Porque puede ser que no escuche lo mismo que vos, pero se te escapan sonido de las pupilas.
Y siento que estoy improvisando, que estoy alterando mis propias melodías.
Siento que me siento dueño.
Un compositor más, adolescente, con un pronóstico de muerte prematura.
Estamos bailando, y me rompe el corazón lo hermosa que es esta fiesta, dónde sólo hay una radio, con un a estática infernal, quemándonos los sentidos.
Deberíamos tener convulsiones, pero seguimos bailando.
Capaz que alguna vez se acaban las pilas y nos quedemos en silencio.
Entonces me voy a animar a silbar.
Y vos vas a cantar en voz alta.
Me parece un buen final.

0 Diálogos: