oelrayososvos

29 mar 2013


MEAME DESDE EL BALCÓN


Cuando hablás del futuro imagino a tus ojos despegar
y creo que estás fascinada
por mucho que el fatalismo impregne el cierre 
de toda teoría
y creo que confías en la conspiración
con una fuerza que me supera
y me obligás a ocultar
todas las verdades
y te descubro en los túneles
que llevan
a otro lugar
donde no sabemos
si va a salir el sol
pero que parece brillante
y me ciega
y quizás el presente sea un rayo
o el rayo sos vos
y se prenden fuego mis sentidos
y soy un incendio dispuesto a contagiar
persiguiendo de cerca tus expectativas
hechas 
de
gasolina
y no sé si nos estamos riendo
o somos terroristas
no sé de quién nos ocultamos
porque hay un código en el modo en que separás
las 
sílabas
como si toda vos fueras
un rompecabezas
o una constelación
para 
armar
lo que debe significar
que no hay nada escrito
que los dioses están
ocupados
mamarrachando
un cuaderno
borrachos
en la oscuridad
a las tres de la mañana
hablando por teléfono 
en susurros
y los escucho
y
a veces
tienen mi voz
o la tuya
y decimos lo mismo
pero nunca es igual
y es una melodía
que se propaga
y rebota en todos los satélites
que unen los mundos
porque es la música
lo que llena los silencios
lo que se escapa de tus suspiros
cuando hablás del futuro
y te imagino
mirando para un costado
tan convencida
que pareces ausente
y te tomo tan enserio
que quiero que te calles
contándote un chiste
del que no me acuerdo el final
para decirte que sí,
que conozco el Apocalipsis
pero que no conozco
nada de lo que hablás
y hago un esfuerzo
para que no descubras
que tu incertidumbre me devora
y hace que imagine
más futuros
que los que sería capaz
de 
imaginar
cualquier otro ser vivo
¿dejamos huellas
o ya
aprendimos a volar?
¿habrá grabaciones
decodificándonos
cuando descubran
que alguna vez
hubo algo llamado humanidad?
¿escribirán poetas drogados
sobre las madrugadas
que desarmamos
y que vamos 
a desarmar?
¿vamos a ser una obra de teatro
en un 
teatro espacial?
¿vamos a ser el mito
en los libros
de la no-historia
en los pasillos
de bibliotecas secretas
perdidas
en la atemporalidad?
¿van a encerrar éstas líneas 
bajo siete cajas fuertes
para que ya nadie
intente
Intentar?
Despegan mis ojos
cuando hablás del futuro
y el futuro no existe
porque el mundo se hace mundos
creando partículas
que duran nada
como chispas
que se deshacen
en la
oscuridad.

Lithium


EL JARDÍN DE LAS POSTDATAS


Te estoy dedicando poesías
¿qué significa eso para vos?
ya no escribo cartas
¿y sabés qué?
mejor
yo encontré un jardín
y vos encontraste tu yo
si nos dimos un regalo
que haya sido la raíz
del
temblor
¿cuántas vidas regaste
como para saber
que todo fue un error?
yo creo que lo nuevo
ahora o después
va a ser el Sol
y será tan íntima esta tormenta
que siempre voy a llevar la postal
que dice: “desolación”
porque las ruinas son sonrisas
que se recortan en el cielo 
de cada
intuición
cuando las palabras envejecen y se marchitan
en cámara lenta
para que florezca
la percepción
y vamos a poder guiñarnos un ojo
en alguna otra dimensión
o quizás en otra
todo esto no sucedió
y es la semilla
lo que late
porque nunca hubo
corazón
y escucho tus lágrimas
y veo la sal de tu calor
y toco el rojo de tu ira
saboreo la textura
de tu
decepción
y la savia de mis sentidos se apaga
otro día 
otro hoy
escribo tu nombre
dos puntos
y,
en lugar de una declaración,
germino en malas rimas
y te beso, te asusto, te echo, te reclamo, te hago burla, te robo, te río, te disparo
te confieso, te desarmo, te convenzo, te psicopateo, te escupo, te llamo
te miento, te abrazo, te pierdo, te olvido, te vuelvo
silencio,
te mato,
en cada renglón
que es otro pétalo arrancado
o muchas postdatas perdidas
atadas 
en
un
ramo.

COTOsiempreestuvocerca


BORRACHO EN EL PATIO DE COMIDAS


Otro vino por vos
en un vaso de cartón
tranzar dignidad nunca me salió 
mejor tomo del pico
y brindo con mi sombra
que siempre soporta
más
que yo
y acaricio el piso
con los dedos
ansioso de sentir el temblor 
que alguna vez dejamos
al correr
al saltar
al dibujar un corazón
(ahí, donde no estuvimos
o sí,
pero no)
y te confieso que nunca quise ser romántico
fue un impulso y nada más
fue no pensar
la mejor decisión
y hoy
levantarnos llenos de mugre
nos da pavor
y no quiero que nada sea eterno
por eso vacío otra botella
por vos:
soy un hermoso asesino
con ojos cerrados
tan incompatible
que voy a ser tu amor
cuando el silencio diga “hola”
cuando vuelva el misterio
y extrañes mi voz
leyendo
hiriente
con crueldad
una de terror
porque no quiero divertirte
quiero que tengas pesadillas
para que me despiertes
y me cuentes
todo lo malo
el motor
y aunque nunca lo dijiste de ese modo
que tanto hubiera querido escuchar 
tu eco se deforma
y llega diferente
ni mejor
ni peor
pero con la suficiente incertidumbre
como para que se suicide 
otro vino
en
tu honor,
usándome de excusa
de envase
para tanta 
perdición
que embriaga y enamora al futuro
que muere por una noche
con 
mi HOY.

chicosperdidos


MANSIÓN ONIRIA


Y pienso que cuando vuelvas a verme
te vas a avergonzar
porque nunca soporté perder
así que hice una meta
de tanto caer
y creo
sin sentirme molesto
que soy el peor
que no fueron en vano las promesas
que esto
también
es para vos
así que no llores
no insultes
no pidas perdón,
seamos
así de distantes
y disfrutemos
del ancestral dolor
porque si te quedan dudas
no olvides
que los fósiles son
el piso de hoy
y no quiero ser fatalista
soy el chico perdido
que el mal clima te vendió
el que venía sin garantía
y
sin instrucción
un poco usado y gastado
y te debo las cajas
que no son cajas
son mansión: 
la cueva/ el túnel/ la nave extraterrestre
la tumba/ el calabozo/ la prisión
el único lugar donde puede ser libre
la 
Imaginación,
irremplazable
porque la fábrica explotó
un mal negocio
porque nadie, nunca, querría tener dos
pieza de colección 
en el museo de rarezas
de una feria fantasma
que nunca existió,
y que no te asuste que te diga
que yo también
hubiera querido 
funcionar mejor
pero no puedo negar mis engranajes
que son tan puros
como
tu amor.

retrovisor

24 mar 2013

~[CARRETERAS PLATEADAS]~


 
Hay un asiento
que ya nunca voy a ocupar
y si vamos en el mismo auto
no me pidas que lea el mapa
o te ayude a descifrar,
se me pasan los carteles
las advertencias
el límite de velocidad:
estoy mirando otras cosas
y no me cuesta olvidar,
es que tengo la idea de que un auto
puede funcionar sin motor
sin ruedas
sin cinturones de seguridad
siempre y cuando haya música
o siempre y cuando queramos cantar
y perdoná si no puedo prometer despertarte
si tus ojos se cierran
en la curva
y soñás:
no quiero prohibirte que vivas 
en todos los lugares
que imaginás
lo que significa que habrá mas accidentes
de los que podemos soportar,
algunas cicatrices con orgullo
algunas con tristeza
otras para ocultar,
y sé que voy a sintonizar tu risa
y vos la mía
cuando en la radio digan
que el choque
fue fatal.

7

19 mar 2013


mi petaca llena de oscuridad


 
Veo cómo llueven astronautas
y hago apuestas
mirando por la ventana
y pienso en que podrías aparecer
y que si lo hacés
antes de que se terminen éstas líneas 
algo
quizás
debería significar
y pierdo tanta objetividad
que se vuelve el mayor tesoro
la
trampa
el nuevo motivo
por el que mis dedos van a entumecerse
lejos del pensamiento
y
del plan
desesperado por llenar
vaciar
y nunca saber
si me miento
o soy el mejor
a la hora de apostar
mientras llueven esculturas
de dioses
que nunca nos pertenecieron
y me resulta triste
y un poco romántico
que sólo asumamos otros mundos
al verlos caer
y me pegunto si no será mi fascinación
la cuenta regresiva
que
en un momento u otro
desembocará en la explosión
de tu ciudad
mi ciudad
nuestra ciudad
que es el baúl-mágico de los recuerdos
de niños que se disfrazan y corren
que se enamoran por primera vez
que por primera vez se piensan de viejos
y sonríen
entusiasmados
ante las puertas del cementerio
linternas en las manos
y ganas locas de profanar
o regresar
o llorar
o confesar:
“el único miedo que tengo
es dejar
de tener miedo”,
y llueven los dinosaurios
que van a venir después
cuando nos mate el meteorito
o nos olvidemos
de
respirar
-o las ganas
o esperar-
y no sé si me debo una copa
o si tengo que exigir 
¿qué se siente ganar?
¿qué se siente
que no haya modo 
de
fracasar?
porque acá estás 
a unas líneas del final
y no sé si hice tiempo
o no pude parar
pero no veo nada de extraño
en no querer continuar
y decís
(mientras llueven video juegos
películas sin terminar
calles angostas
faroles
velas
callejón
noche
galerias
exitación
fuegos ratifícales
mar
el universo en una habitación
siestas en autos
estrellas fugaces
reproches al sol
picnic en la tormenta
un viejo con 7 perros
una herida en el labio inferior
apocalipsis en bicicleta
mi petaca llena de oscuridad
mañanas con “hola”
bares de matar
una cama llena de historietas
carcajadas-
en alguna soledad)
que venís a decir
que no vas a estar
para 
mi funeral:
“disculpá… me salió algo”
“no hay drama… 
otra vez será.”

puedahablar

CUERVOS CONFUNDIDOS
 

 
Nieve que es cristal
y todos los colores estallan
directo en mi cabeza
despintando
la
razón

y
algo más
como si alguien hubiera dejado una carta
en la dirección incorrecta
y creo que no soy el destinatario
y casi puedo asegurar
que no la escribí,
y las películas
por las madrugadas
se me empiezan a mezclar
y tu monstruo se come a mi héroe
mi víctima preferida
va a pasar una noche
con 
tu 
princesa
y no quiero asustarte
pero deberías saber consolar
porque él va a morir
y ella
seguro
va a llorar
y si piensa en el acantilado
quizás perdamos algunas páginas
que yo no quisiera
regalar
por mucho que juegue 
a
quemar
prefiero una inundación
y soñar con branquias
para que podamos mirarnos
pero ninguno 
pueda 
hablar
que las burbujas sean la nieve
que sube 
y nos deja
en 
paz
mientras la música llega
siempre amortiguada
desde la cabaña
de mil ventanas
que imaginé
después de mutar tu recuerdo
en
mi 
realidad
y 
espiar
lo que sucede
detrás del vidrio
y ver la moda que dibujamos
en fiestas
siempre hermosas
y 
de 
dolor
cuando cada fiesta
es la última
cuando está 
la 
obligación
de no poder
terminar,
y si pudieras desnudarme
y encontrar un diccionario
para todos mis silencios
diría:
“yo alguna vez pensé en mañana
y nunca
en el ayer”
y esperaría que no dijeras nada
o ver que tus fotos 
se ponen sepia
que todo 
se hace 
una partícula
de polvo
que baila en el sol
que va a despertarnos
cuando sea lo venidero
el 
nuevo
sabor.

sótanoyhuracán

MEZCLAR EL WHISKY CON EL DEDO





Debe ser mi culpa
porque me estoy desmayando
de tanto no poder
o de tanto llorar
y me hago cargo 
de toda la tormenta eléctrica
que debe estar sacando brillo
a alguna noche
muy lejana
capaz cuando nos conozcamos
o cuando nos queramos separar
y me tiemblan tanto los dedos 
que cada palabra podría ser otra
se superponen todas mis ganas
y si pienso en cosas tristes 
es para que puedas imaginar
que a veces 
aunque el pronóstico diga lo contrario
te podés enamorar
y veo con tanta perfección
que no ves
que nunca te podría ver
que me quiebra la sincronía
y quisiera ser más sincero
y decir
que seguir no me parece 
tan necesario
en serio
que podría quedarme parado
deteniendo conmigo
todos los discos
los libros que no te regalé
dejando una llamada
sin contestar
dejando una poesía guardada
para que la puedas buscar
cuando tengas ganas de buscarme
cuando nada te haga más feliz
que pensarme
y sentir
que todavía debo seguir
y es tan hermoso 
cada secreto
cada mentira que voy a decir
que me siento maravilloso
horrible
fatal
el mejor
porque 
mientras no haya un final
soy todo 
lo que te va a matar
y no quiero reírme, 
de verdad,
mi cara no sale beneficiada
con esos gestos 
que te hacen 
tan hermosa
tan 
especial, 
así que no arruines mi reputación
porque para eso
basto yo
y no quiero que quieras
pero quiero querer
y me asusto tanto
que no puedo leer
sin tener la sensación
tan bella
de que me leo por primera vez
que me escuchás
que se me hace imposible encontrarte
pero que cuando menos lo esperes
vas a sentir igual
y vas a odiarme tanto
que ya nunca nadie 
me va a querer odiar.

adicto

Y ME ASUSTES
 
 
 
Te juro que un día 
voy a dejar de tener ganas de decirte buen día, 
pero el día no es hoy
y juro que vas a dejar de escuchar mi histeria 
y juro que en algún momento futuro 
vas a estar esperando que estalle tu cerebro 
y vas a querer que te quiera pelear, 
y vas a jurar que alguna vez 
vas a dejar de extrañar, 
pero que hoy no es el día 
y te juro que no voy a contestar el llamado, 
para que no me atiendas 
cuando te quiera llamar 
y te juro que voy a desear
con todas mis fuerzas de desear 
que no hayas dejado un mensaje 
y voy a nombrarte en la poesía 
que voy a dejar escrita con mi voz 
en ese lugar que visitás 
cuando tenés ganas de que yo no aparezca 
nunca 
más, 
y te juro que voy a robarte 
más de lo que jamás podrías imaginar, 
porque yo sé cosas del futuro 
y lo que me llevo 
mañana va a faltar más, 
como me falta algo si no digo buenas noches 
cuando me decís y me jurás 
que es la última vez que decís buenas noches 
antes de acostarte y soñar 
que seguís jurando que nunca me necesitás, 
al tiempo que juro que voy a estar en tus sueños 
y que voy a despertar 
con un grito, 
alguna madrugada, 
cuando jures que nunca compartirías mi insomnio, 
cuando jure que nunca pasaría una noche con vos 
y me asustes, 
jurando que es la última vez que venís, 
que mañana vas a dejar de perder el tiempo en mi, 
y yo jure que fue un error seguir
y jure seguirte
para repetir
para siempre
que para jurar hay que ser muy valiente
o muy estúpido
o muy incoherente
y te jure que jamás juraría
que no me importa
que no me estoy muriendo de ganas
que no estoy temblando
que no estoy desencajado
adicto a la posibilidad
que no quiero correr
y cumplir
todas mis promesas
(te juro)
de 
una
buena
vez.

conelhuracán

10 mar 2013


DECIME "YA FUE"
yo te digo "ya será"


Hola, sí, 
ya sé, 
lo arruiné
y pensalo así:
podría vaciarme de poesías hoy
llenar de huesos y magia
toda tu habitación
y que quieras entender las ruinas
buscando las formas de esa prehistoria
que habla de un futuro
que no te deja dormir
que te da miedo
que te hace sonreír
y vas a querer abrazar mi museo
aunque nunca hubieras sospechado
que un museo
se podía 
abrazar
y espero que no sospeches
que todo es 
un mal paso
que te vendo esta entrada
para invitarte a salir
y se va a caer el decorado
“no estamos en un museo,
es una casita del árbol”
y sobre la altura de tu vértigo
vas a vomitar
yo no tengo amigos
soy la intensidad
y si estamos acá es para que sepas
que podría sacar todo
de una sola vez
para que se queden todos
con los rostros desencajados
y que sigan los niños
corriendo por el cementerio
soñando con brujas
o los más viejos mirando por la ventana
viendo 
al mundo
caer
y puedo volver tristeza
toda la sorpresa que impregna
mi 
ser
para que salgan las burbujas 
por las ventanas
porque estamos
hundidos
en el fondo
de 
ningún 
mar
por eso te ahogo
por eso me ahogás
en el callejón sin salida que forman 
todos
los corazones
en el cruce
en el nudo
en la distancia
que hoy me sirve para armar un lazo
y seguir trepando
más cerca o más lejos:
la superficie
o el centro
y pretendo dejarte sola
para ver qué pasa
cuando la resaca te abandone
y empieces 
a
despertar,
para ver qué pasa
para ver si llegué a olvidarme todo lo que dije
y venís y me lo recordás
o quedarme pendiente de los ruidos
matarte en las tormentas
revivirte con el huracán
y pensar en no pensarte
cuando ya no me quieras pensar:
y que alguien diga:
“hola, sí, 
ya sé, 
dice
todo
(todo)
mal.”

conundedo


EL CUERPO DE UN ANIMAL MUERTO


Sacame está nueva obsesión
de querer escribir sobre trenes
de querer bajar a las vías
de pensar en paisajes que no se conectan
al menos que sepás escuchar
el silbido
que llama 
que guía
y vuelve ritmo 
el motor
y debe ser por eso que sueño con canciones
que sueño con dejarme atropellar
que sueño con ser el súper héroe
que pone freno
con una mano
que se pierde 
entre el barro y los pastos
de una estación
que está abandonada 
en otro mundo
en otra dimensión
que no tiene forma
pero tiene voz
que es mil voces acopladas
y que trae la imagen 
de un tipo con barba
con ropa gastada
y sé que todos dicen
que no tuvo suerte
o que su mirada está apagada
pero yo sé que hay un brillo
ahí
donde nadie señala
y sé que viene de la mejor fiesta
y sé que tiene todo lo que hay tener
para no tener nada
y sé que una noche como ésta
en la que hago equilibrio
entre los andenes
imaginándote
con risas
o 
tan 
desesperada 
él decidió
ya no hacer equilibrio
y tomar
la decisión acertada:
caer para un lado 
o para el otro
a la hora indicada 
(¿te acordás a qué hora
te maté
la primer
madrugada?)
con los auriculares clavados
en la nota
tan preciada
y 
VIAJAR
hacia cada todo
hacia 
cada
mañana,
en la que estés dibujada
vestida de palabras
formando una imagen en mi cabeza
cuando ya las vías
estén lejanas
ahí,
donde no puedo predecir mi casa
cuando no haya distancias
o haya nostalgias
porque si bien sé que el tren pasa
nunca hay una rutina
un horario
y esa es
la mejor
peor
de las trampas.

mundos-veneno


La Maldición de la Novena Sinfonía


Y la tormenta llena de sonidos el mundo exterior, creando (y recreando) la melodía con la que alguna vez me quebré, con la que desafiné el pentagrama de tantas madrugadas, haciendo insomnio lo que para vos era pavada, con la que dejé sin voz a la plaza, con la que aturdí a los fantasmas de casas que probablemente ya no estén encantadas, con la que golpee las paredes, siempre buscando hacer un agujero que me diera la chance de poder espiar, de pensar en un “ustedes”, de pensar en las habitaciones que son tan fáciles de imaginar cuando la imaginación se incendia y corre con mucha más velocidad que el resto del espíritu, que contempla y mueve un pie, al ritmo, ansioso, enamorado sin compasión, jugando al sútil espectador, que espera la orden, el pie para entrar y buscarse un lugar en la fiesta que pasa adentro, donde las copas aún no murieron pero donde los invitados siguen cayendo, de a uno, sonriendo o llorando, caras que envejecen en el piso y que estoy seguro que nunca podría recordar, porque el sol en los parques era mucho más efectivo que las llamas de mi terquedad, porque me cansé de que todos mis poemas digan que no nos conocimos por casualidad, así que por cada borrachera victoriosa, por cada sobredosis lujosa, en un baño, haciendo de rock, por cada suicidio feliz y traidor, por cada beso desesperado, por cada abrazo quebrado, por cada instante de brutal confesión (“deberías saber que no sé tu nombre pero me acuerdo tu dirección…”), por cada epifanía solitaria entre cenizas que forman paisajes de montaña, que remiten a un futuro anterior, por cada globo que se desinfla, por cada guirnalda que se vuelve corbata y decora una camisa (“mira mamá, crecimos… ahora buscamos trabajos que nos hacen más optimistas”), por cada botella que se estrella, buscando la atención de todos, ganando el respeto de otras botellas, que saben mejor que vos y yo, lo que es vaciarse, por una causa, que no importa si mejor o peor, siempre y cuando sepas lo que das, lo que podés causar, el eco que podrías causar, porque lo importante no es saber en qué momento saltar, sino qué salto eternizar: romperse es muchas veces, más una de verdad, como destejer el mapa de los besos que existieron y saber dónde está el palacio, marcado con mi lágrima y tu labial; 
por cada chiste sin sentido, por cada taquicardia y por cada “me gustás”, una parte de la última casa se desmorona y el ruido queda tapado, porque la tormenta no se calla, no se detiene, y es más fuerte y nos trae la luz intermitente de cada emoción, que atraviesa las pupilas y se instala en el cerebro, dando origen al cortocircuito, o, a veces, en el centro del corazón, que se divide, en partes que jamás serán iguales, para convertirse en el condimento secreto del trago que algún demonio ancestral prepara, licuando, haciendo que fluir sea pura intensidad (necesidad), porque si yo fuera la sangre buscaría escapar, salir, sin piedad, para jamás tener que memorizarme el camino, para nunca tener la posibilidad de buscar el detalle de tal o cual calle, para nunca sentir que a ese colectivero lo conozco o que a ese tipo lo vi mil veces, a veces casi desnudo, a veces de traje, para nunca caer en la trampa de pensar en que la chica que atiende ese quiosco me mira como ausente, como si quisiera decirme algo lindo (“o capaz le caigo muy mal”), para nunca entregarme a la sorpresa de entender que no hay sorpresa, que cada casa, auto, árbol, plaza, banco, niño-jugando, vieja-quejando, se repite y estar vivo deja de ser una paranoia, para ser una obsesión y perdoname, pero prefiero ser un perseguido, que un perseguidor y el invasor viene de una galaxia que queda por adentro, a 300 kilómetros de años luz, en un espacio lleno de palabras mudas, que se dibujan y ensordecen la visión;
mundos-veneno en plena combustión, que congelan realidades en puntos estratégicos del cosmos interior, para dar luz a la constelación que forma la palabra “amor”, que suena, cuando se lee, como una explosión, que llega como apagada, porque la tormenta no se apaga y llena y revive y mata, un trueno, la luz cortada, las velas derramadas, el fuego, el humo, las risas, las miradas sin encontrase, la mano tomada, el ritual, la danza, para que todo se seque, para que se vuelva 
desierto 
la mañana,
para que haya silencio,
por fin, 
entre tu cara 
y mi cara.

transainterior


42 SH


Me duelen los ojos
de ser tan insistente
y salgo ciego
atravesado por todas las miradas
que confluyen en el prisma
que es mi cerebro
y reduzco las ecuaciones
para ver como todos
como uno
empapado por los sueños
la frustración
el domingo de la poesía
y el sábado del reviente
el viernes de la obsesión
el jueves del terror
el miércoles de la pasión
el martes de la insatisfacción
el lunes del error
de nuevo el domingo:
la depresión
que es energía liberadora
dentro de la olla de la bruja
dentro de la ebullición 
del conjuro
de la transa
cuando el brujo envenena el agua
para complacer 
al pelotudo de turno
enemigo
interior
que se pasea de turista
en rostros ajenos
para jugar al “espejito, espejito” 
y enojarse
o victimizarse
pedir limosna
pegarte un tiro
por careta
por sacar monedas
por seguir de largo
porque no hay bien o mal
hay un lugar
para
cambiar
y cambia
sin embargo
todo lo demás
como un asesino a sueldo
que muta la apariencia
para lograr
matar
con
impunidad
y pasea imaginando 
el mejor disfraz
algo que logre vencer la paranoia
y que le pregunten la hora
y caer
mal:
“son las tres de la mañana…”
y darse cuenta
demasiado tarde
y sonreír
agradecido
decir, 
con la bala germinando
en el pecho,
“buen truco señorita
no esperaba menos
de
usted”
estrellarse 
con el estruendo necesario
con el melodrama exigido 
romper una mesa
crear una instantánea
en alguien impresionable
una anécdota
imposible de recordar
un brindis suspendido
un beso congelado
un susurro
en 
la 
oscuridad
el deseo
de atar
en nombre de la libertad
mintiendo el mejor regalo
para que sea la bomba
en un cumpleaños
concurrido
al que no te invitarían
jamás
todo conectado
y la luz bajando sobre el único actor
el que sobrevivió
el zombie
el salvador
el ejemplo
el que arruinó la herencia
el peor:
gracias por haber venido
aunque no los vea
los sentí
cada
vez:
y alguien 
muy de fondo 
lo confunde con otro
y se acuerda de una chica
de una tarde de lluvia
de un libro olvidado en una plaza
de una bufanda en el teatro
del sexo en el tren
y dice para sí
(a veces no queda otra opción) 
que nunca nadie lo entendió tanto
que lo mejor que le pasó fue entender
la verdad
de cada 
ficción
ese trapo en los ojos
para tropezar
besar el piso
(dulce perdedor)
y ya no sentir de qué lado queda casa
de qué lado queda 
el espejismo
o
la
ilusión.

podercitar

2 mar 2013


LOS METEORITOS SON BOLLITOS DE PAPEL


Y cada pared escrita está fragmentada
con las cicatrices 
de mi última tempestad
que me dejó desconcertado
y con un resfrío mortal 
mientras nadie más se enfermó
y hablan como si nada
bajo el mismo sol
que quise aniquilar
pero me prendí fuego
mucho antes de llegar
y cabalgué un meteorito
pensando que
quizás
podía divertirme
y escribir un buen final
pero las perspectivas engañan
cuando estás tan arriba
y esa pupila emocionada
se convirtió
con demasiada velocidad
en la boca hambrienta
de la ansiedad
que mastica
rompe
tritura
traga
siempre
sin
disfrutar
pero pidiendo más
engordando nubes
con un pretencioso bien estar
un hermoso clima
que me enferma un poco más
y no calma ninguno de mis ardores
que se extienden por cada sonrisa 
que mirá para arriba
como buscando
y casi que quiero gritar:
“yo vengo de allá”
o
“te quiero matar”
pero sólo los graffitis de antaño
me pueden escuchar
y quedaron borrados
de modo 
parcial
para que cada frase
promesa
amenaza
puteada
confesión
no se termine de concretar
y pienso en lo intenso
de 
recordar
de poder citar
a tantos poetas anónimos
y que nadie se percate
de la ausencia
de mi fracaso
de mi tos
de cada estornudo
tembloroso
que salpica
con malicia
todo esta mentira
de la salud
mental.